Tweet Día 2. Personal sucess

La lluvia nos acompañó a lo largo de este segundo día. No quedaba lugar a dudas de que el mal tiempo acecharía nuestro viaje pero no de forma tan inmediata. El día comenzó a unas valientes 7 a.m. para una ducha rápida, un buen desayuno y para dirigirnos a la parada del autobús. Nuestras incertidumbres con respecto a nuestra parada se disiparon cuando hablando con el conductor nos indicó la parada pertinente. Gracias al mapa que nos dejo Clare pudimos llegar a nuestra academia sin ningún tipo de problemas.

Allí, casi ya las 9 a.m nos dispusimos a realizar la prueba para el nivel. Ésta, a diferencia de Liverpool, consistió en tres partes: un tipo test (de gramática), una redacción (yo a diferencia del resto tuve que hacer dos, debido a que me decanté por el tema más fácil y la profesora que corrigió mi examen me sugirió que realizara más difícil) y en último lugar, una prueba oral. Finalmente el resultado fue un nivel intermedio. Más o  menos lo esperado. El titulo de la entrada está vinculado a esta última prueba: la oral. El profesor encargado de hacerme la prueba oral, me preguntó que para que necesitaba el inglés. Le contesté que estudiaba derecho en León y que el inglés era actualmente básico para cualquier trabajo y maticé que era necesario para obtener éxito personal ("personal success"). 

Tras la confirmación de nuestros niveles, nos dimos una pequeña vuelta por Manchester y comimos en un Subway del centro comercial. Se trata de un pequeño establecimiento de comida rápida. Posteriormente dimos una vuelta por el mismo centro comercial hasta que finalmente a las cuatro fuimos con el resto de compañeros de la academia hacer un tour por Manchester. Pudimos contemplar alguna de las zonas importantes de la ciudad. Pronto iremos a visitarlas y podremos comentarlas de primera mano.

Y el día de hoy finalizó con el regreso a casa. Si ayer teníamos dudas de como llegar a la academia en autobús, no fueron dudas menores nuestro regreso. La lógica imperó en nosotros y paramos en una estación a petición de mi compañero Vity, la cual resultó ser justo la que deberíamos haber bajado. Cosas de la vida. Posteriormente nos dirigimos a casa a cenar (a los curiosos, sí hemos cenado). Así que nada más que contar en el día de hoy. Mañana espero subir alguna foto de la zona y próximamente de la familia, que hasta ahora se están portando de diez. Ahora que nombro a la familia, hoy a la hora de cenar conocimos a otro hermano de Clare junto a su hijo. Gente en la línea de la familia: de diez.

Así que hoy el día no ha dado para mucho más... mañana más y mejor. Nos vemos mañana lectores de Muros de Ilusión. Sed buenos e intentar estar atentos de próximas actualizaciones. 

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